jueves, 29 de noviembre de 2007

LA VIDA NO TERMINA NUNCA

Ya está a la venta el último libro de Willigis Jäger;

LA VIDA NO TERMINA NUNCA.

Editorial Desclée de Brouwer.

LA VIDA NO TERMINA NUNCA.-

Willigis Jäger, monje Benedictino y Maestro Zen, sabe poner de manifiesto para el hombre de hoy la esencia espiritual común a todas las tradiciones. Interpreta las imágenes antiguas y los relatos de salvación de una forma nueva. Muerte, resurrección o renacimiento se muestran bajo un nuevo aspecto, se comprenden de forma completamente nueva, de modo que ya no están en contradicción con la concepción del mundo del siglo XXI. En el presente libro, Willigis Jäger explica una y otra vez por qué la vida no tiene fin y la muerte no existe, aunque cada uno de nosotros morirá en su personalidad. Sus palabras pueden orientar a cristianos con dudas y a cualquier buscador espiritual. Jäger trata aquí los grandes desafíos en la vida del ser humano, como son la vejez, la enfermedad y la muerte. Antes de entrar en materia, reflexiona sobre las imágenes y conceptos que nos hemos formado de Dios, porque esta comprensión condiciona de una forma muy decisiva nuestra relación con los desafíos existenciales mencionados. En lo más profundo de su corazón Willigis Jäger es un maestro místico. Le importa despertar en nuestro interior, mediante la lectura, una comprensión que no es posible transmitir con palabras y que, sin embargo, tan sólo tiene que ser estimulada, porque ya existe en lo más íntimo de nosotros: la comprensión mística. Nos dice que Dios obra y el ser humano deviene, y que esto supone el nacimiento de Dios en el alma. Dios no puede ser algo separado de la creación, sino que es la fuente de la que emanamos. Esto lleva a una vasta experiencia existencial, con y a partir de Dios, hacia una vida llena de sentido. “Creer en Dios” se convierte en “Vivir a partir de Dios”: Dios se manifiesta como ser humano. De ahí que, en el fondo, nuestra vida sea el auténtico culto divino. Dios quiere ser persona en nosotros. Pero nuestro yo intenta comprender, con fronteras y símbolos que se corresponden con nuestra cultura, aquello que carece de fronteras y de tiempo. El libro termina con sus consideraciones sobre las grandes catástrofes que azotan a la humanidad como, por ejemplo, los tsunamis. Tales catástrofes suscitan de forma radical y nueva la pregunta sobre Dios (¿Dónde estaba Dios?), sobre el sentido y el sinsentido de la existencia humana. Willigis Jäger da respuestas también radicales: también en la catástrofe está presente Dios, es la catástrofe misma. Suena duro, pero también nos muestra que nunca estamos realmente abandonados por Dios, ni en la vida, ni en el morir.

viernes, 25 de mayo de 2007

El Zen es un camino espiritual que, aunque proviene del budismo, no está ligado a ninguna religión determinada. De ahí, que sea adecuado para cualquier persona que busque encontrar respuestas a las preguntas existenciales de la vida. Es un camino de práctica a través del cual tratamos de alcanzar la experiencia del despertar a la Realidad verdadera y, con ello, a nuestro verdadero Ser, desde donde brota la fuerza para la vida cotidiana. Esta experiencia, satori, (iluminación) es una experiencia humana universal, de carácter transcendente y transreligiosa, que nos llevará a la paz, a la sabiduría y la transformación. Bai’Ka An, Carmen Monske