lunes, 29 de noviembre de 2021

NAVIDAD 2021

 

NAVIDAD 2021

                Estamos en el tiempo de Adviento.  Tiempos de esperanza para lo Nuevo, tiempo de despertar, despertar para poder acoger lo Nuevo. Lo estamos deseando más que nunca. Mirando atrás,  este año se distingue por grandes catástrofes naturales que se han sucedido con gran rapidez. Incendios forestales en EEUU, Canada, Turquía, Grecia, y en Andalucía el más reciente; las terribles inundaciones en Alemania con cincuenta muertos, la reciente tormenta en Canada, y no olvidemos la actividad del volcán en la isla de La Palma, que no cesa.

                Asimismo, los sucesos políticos han inundado las noticias. Pensemos en Afghanistan,  con miles y miles de afganos huidos de su país, la mayoría atascados en la franja entre Polonia y Belarús, empujados allá por Lukashenko, junto con migrantes de Siria y Yemen, donde viven en condiciones infrahumanas con temperaturas bajo cero que ya se han cobrado varias vidas. El conflicto diplomático de Marruecos con España con el cierre de la frontera por parte de Marruecos sin previo aviso, la crisis migratoria de los menores marroquíes a Ceuta, los migrantes de África que siguen llegando en pateras a nuestras costas.

                Todo ello unido a las constantes amenazas del cambio climático. Y la pandemia del Covid-19 que prosigue, y que ya ha producido cambios fundamentales en la sociedad, como todos sabemos. Y ahora con la nueva variante Ómicron, que ya invade Europa.

                Estamos en crisis. En chino, la palabra crisis consiste en dos kanjis: 1º: peligro, y 2º ocasión u oportunidad. Consideremos esta gran crisis de la humanidad como una etapa en el proceso del crecimiento espiritual. Cada etapa trae cambios que pueden resultar dolorosas. Pero a menudo ocurre que el desapego de lo conocido depara lo Nuevo.  Y  miremos esta crisis como una ocasión de recordar que todo y todos estamos interrelacionados. Estamos unidos entre nosotros, con la Tierra, con la naturaleza. Nada existe separado por sí solo, de forma independiente. Nuestros retos ambientales, económicos, políticos, sociales y espirituales están interrelacionados. Se trata de reconocer que todos los seres son interdependientes y que toda forma de vida tiene valor, independientemente de su valor para los seres humanos.

                Estamos en un momento crítico de la historia de la Tierra,  y la humanidad debe elegir su futuro. A medida que el mundo se vuelva cada vez más interdependiente y frágil, el futuro deparará a la vez grandes riesgos y grandes promesas. Justamente en este tiempo de crisis nuestras sentadas en común en silencio cobran más importancia que nunca. Hace falta una nueva mentalidad y un nuevo corazón. Que utilicemos este tiempo de Adviento a silenciarnos y a abrirnos a lo Nuevo que está por venir.

Feliz Navidad a todos.   Carmen, Baika-an.